domingo, marzo 04, 2007

Blues


Mi blues nació en un paisaje de pantanos y campos de algodón en el Delta del Mississippi, bajo un inmenso cielo blanco lleno de agua y polvo.

Soy negro y mi alma está atrapada en un saxo tenor. Cincuenta y ocho años de quejas, deseo, melancolía y remordimiento se arrastran cada noche entre humo y vahos de alcohol. Pero esta noche toco de otra manera, vivo de otra manera. Ahora es tarde y aquello era entonces. Mi música vive cada noche y muere cada segundo en el aire.

Golpe a destiempo del batería, blue note. Rompe la melodía en un semitono. Saltan los corazones. Tensión, alma, excitación. Abstracción. Una vez, una vuelta más. Mi saxofón llora en una calle oscura. Tónica dominante en La mayor. Para ti, viejo recuerdo de derrota.

Dibujo notas en el aire como zarpazos, trallazos, destellos. Te regalo música con olor a sexo, música con olor a ginebra, música con olor a mala suerte en esta noche perfecta para bailar a la luz de la Luna.

El aire hoy es denso, pastoso y azul de humo. Empapados de sudor dejamos que nuestra música se mezcle con el calor. Los dedos mojados resbalan por las teclas, los trastes y las llaves jugando con la improvisación. El bochorno toca hoy en Madrid con nosotros. Ayer en Dublín fue la lluvia helada. Dios siempre se une a la banda, dice mi guitarrista. El jodido Diablo, le respondo yo.

Veo al público, mi público. Veo bailar las cabezas de los hermanos y moverse los culos de las chicas blancas. Tú estás en primera fila. Veo tu cuerpo joven y hermoso sudar dentro de tu camiseta roja. Tu pelo baila en los tenues reflejos de los focos y atrapa mi mirada cansada. Volvemos cinco tonos arriba. Espera en tónica, clavado en una nota que vacía mis pulmones y llena mi alma. Se mete en tu cuerpo, te penetra y te posee. Eres joven, guapa, blanca y rica. Pero tu culo se mueve con mi música de negro viejo del sur. Son mis notas las que acarician ahora tu pecho bajo la ropa. Te veo disfrutar y me lleno de vanidad.

Miro al pianista y ladeo ligeramente mi cabeza negra. Detrás de su eterno cigarrillo él comprende; es hora de mi solo de doce compases. Este blues es para ti. Quiero que te lo lleves en la cabeza, preciosa niña blanca, y lo tengas dentro cuando te acuestes con tu rico chico blanco. Esta noche harás el amor como nunca, con el viejo negro Charlie.



Una canción para la chica de la camiseta roja: Wild is the wind, de David Bowie

Un libro para la chica de la camiseta roja: Rayuela, de Julio Cortázar

Una película para la chica de la camiseta roja: Alrededor de la medianoche, de Bertrand Tavernier

44 Comments:

Anonymous Anónimo dijo...

Excelente!
Y muy especial, para mí; nací con la delicia del blues (y también del jazz) entremezclada con mi sangre.
Las elecciones que nos dejaste abajo, todas imperdibles!

Besosss

marzo 04, 2007 9:35 p. m.  
Blogger MALEFICABOVARI dijo...

Ufffffff, qué tremendoooooooooo post¡¡¡ Seguramente esa chica tendrá su chico blanco, y el blues de su vida será demasiado insípido para que tiemble cualquiera de sus sentidos... pero es la vida, es así, me hubiera gustado que el sueño del bluesman se hubiese materializado y no sólo se alojase en su cabeza. Dios, demasiado perfecto el texto, no serás tú quién entre humos y alcoholes varios, tocabas el saxo? Es que es demasiado verídico cómo para tomarlo a broma... no se...igual me puedes sorprender todavía mas...
Los kinks... el mejor grupo de la historia. Anótate una canción preciosa suya: How are you? Dedicada a su exmujer Crissie Hynde, cuando ya estaban separados y se la encontró un día por la calle... es poesía pura. Hace muchos meses le ví en la Riviera, y le tiré un plato de plástico con la canción apuntada... me sonrió, y me dijo, oh... una canción demasiado personal... y volvió a sonreír. Ví a dios ese día, lo juro.
BSS,
MALE

marzo 04, 2007 10:20 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Tus lineas me han transportado a la ciudad del blues y el Jazz, a mi querida New Orleans; hace unas semanas la añoré en mi rincón...

Nació mar adentro, de una corriente de aire entre las nubes; con un flujo de viento cerrado que viraba sobre su curva, trazando elipses en el cielo. Parecía una gran hélice de vapor, una espiral garabateando el día en su girar, trazando anillos concéntricos de nubarrones, bosquejos circulares que aumentaban su tamaño en cada rotación. Aquella turbulencia atmosférica era un bucle huracanado dilatándose sobre el éter como la gota de lluvia que dibuja su onda al caer en el charco. Aquel torbellino de vendavales creó el remolino gaseoso mas grandioso que nunca antes había surcado los cielos; una tormenta tropical convertida en el más temible de los huracanes.

El ciclón se deslizó hacia la costa sembrando su camino de desolación. Pero la tempestad arreció su ira al arribar a la bahía. La brecha de la tormenta se detuvo sobre la perla negra. Un descomunal tornado y una violenta tromba de agua azotaron durante horas la capital del jazz; destruyendo hogares, inundando plazas y calles, arrasando los locales musicales, despedazando el corazón del blues. La devastación dejó sumergida la ciudad de los acordes libres.

El ojo del huracán, como un agujero negro del que nada escapa, tragó tras de si miles de partituras y melodías; que algunos esperan, resurjan más allá, en otro punto del mundo; al otro lado del vórtice.

marzo 04, 2007 11:31 p. m.  
Blogger Helena dijo...

Has creado un post sensacional. Qué realismo, he sentido el humo, el olor a ginebra, a sexo y a sudor, la diferencia de razas, de dinero, el calor, la melancolía, todo a través de los ojos y los oídos del viejo Charlie con su saxo ... Me has abducido, en serio.

En mi opinión es de premio. Sólo puedo añadir:

¡¡¡Bravo, negro Charlie!!!

marzo 05, 2007 12:58 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Es de premio, sí

:)

marzo 05, 2007 1:19 a. m.  
Blogger Mandarina azul dijo...

No dejes de tocar nunca, de mirar, de sudar, de llenarte de vanidad y de hacer el amor de esa manera.

Eres grande, viejo negro Charlie. Yo creo que lo sabes.

Un beso.

marzo 05, 2007 1:20 a. m.  
Blogger tzarel dijo...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.

marzo 05, 2007 1:22 a. m.  
Blogger tzarel dijo...

Variación tzareliana:

Bailabas al borde del paraíso creado en ese momento

a tu lado chicas blancas seducían hipnóticamente a los testigos de esa noche en la que mi saxo estallaba

tú la más hermosa con tu olor a milenaria sensualidad, eras para mí la gema con cuerpo de diosa

tú, sólo tú, mi reina negra.

marzo 05, 2007 1:25 a. m.  
Blogger una mujer dijo...

Un libro para Charlie: "Todos los muertos tienen la misma piel" y otro para Art: "Escupiré sobre vuestras tumbas", ambos de Boris Vian.

: )

Al leer tu post no he podido dejar de evocar a uno de mis hombres favoritos que tanto gustaba de la música negra, del jazz y del blues, pero Boris iba más allá de la música, de forma franca, cruenta y explícita nos muestra en ambas novelas ese sentimiento de negro siendo él a través de su personaje un negro con la piel blanca, tomado por blanco y sintiéndose negro, siempre con temor a ser descubierto. La piel blanca y el alma negra, el olor de los colores, los movimientos de los tonos, el blanco insípido y el negro sabroso, el ritmo del alma, el blues.

Una canción para ti: "My dream", de John Lee Hooker.

marzo 05, 2007 1:39 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Chepeau!!

Otro libro para la chica de la camiseta roja: El blues de los sueños rotos.

marzo 05, 2007 2:53 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Lo siento pero antes de acabar de tu post ya estaba tarareando:

El micrófono huele a cerveza
y el calor se podría cortar,
solitarios oscuros, buscando pareja
apurándose un sábado más.

Besos.

marzo 05, 2007 8:59 a. m.  
Blogger Isabel Burriel dijo...

A mi también me ha venido la canción de Bob Dylan. Piano Man.
Rayuela... Uno de los pocos libros con los que no he podido, y eso que me leo hasta las páginas amarillas, bueno, no, es una exageración, bueno que ¿Qué tal el finde?

marzo 05, 2007 9:57 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

No surrender como comentaban antes en algún momento pensé que eras tu el que tocaba ese saxo tenor, ¿y por qué no? Mientras me venía el bop de Charlie Parker susurrando en mi oreja (vale, vale, no es saxo tenor, es saxo alto pero que más da si tu eras Charlie el negro en un garito de Dublín). Ademas de dejarte como recomendación "Bird", disfruta de este enlace, merece la pena ;)
http://www.youtube.com/watch?v=IxqwaJfDMxM&eurl=http%3A%2F%2F216%2E239%2E59%2E104%2Fsearch%3Fq%3Dcache%3AWyv8GABqor8J%3Aividal%2Ecom%2Fjoomla%2Findex%2Ephp%253Foption%253Dcom%5Fcontent%2526task%253D

marzo 05, 2007 11:53 a. m.  
Blogger atikus dijo...

Que bueno...yo creo que el viejo charlie se merecía a la chica de la camiseta roja, ya me lo estaba imaginando, su chico la abandona y ella cae en sus brazos rendida por su arte...se lo merece!!

y no sigo eso queda para la sonrisa vertical...

marzo 05, 2007 11:54 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Repito el enlace porque ha quedado en una larga sucesión de letras y números, disculpad,
http://www.youtube.com/watch?v=IxqwaJfDMxM

marzo 05, 2007 11:56 a. m.  
Blogger Portarosa dijo...

Excelente post. Precioso.

marzo 05, 2007 12:26 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

¿pudiera sugerir un cuento para nosurrender, que seguramente ya leyó?
El Perseguidor. me pillaste, ¿cierto?

:)

konexiones en blanko y negro

:*

k.

marzo 05, 2007 1:17 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Gracias, artemis. Exactamente; el blues y el jazz se transporta en la sangre y es contagioso por vía emocional :)

Maléfica, tendré en cuenta tu propuesta; veremos si podemos hacer que el viejo Charlie se acueste con la chica. Pero no te prometo nada, eh. en cualquier caso, a veces hay más intimidad y erotismo en una canción que en unas manos. La próxima vez pondremos una canción de los Kinks.

Itoitz, no te leía entonces. Nueva Orleáns es denso como la miel y caótico como el propio tornado. Creo que la ciudad se recupera poco a poco. Nunca he estado, y tengo ganas.

Helena, como bien sabe k (que escribe aquí abajo) sí que fue de premio. Un premio pequeño en un foro de literatura que me hizo mucha ilusión; se trataba de escribir un texto de menos de 4000 caracteres sobre la vanidad.

K, algún día tendré que poner otro premio conjunto entre tú y yo, eh ¡¡con tu permiso!!

Mandarina, te diré un secreto... en realidad yo no soy negro ;)

Tzarel, gracias por pasarte por aquí. Y preséntame a esa negra con cuerpo de diosa! ;)

Una, estuve a punto de poner ese otro libro de Boris Vian, pero al final me quedé con esa manera que tiene Cortázar de obligarte a comprar un disco de jazz después de leer lo que ocurre con él en rayuela :)

Billywild, no he leído ese libro. Tomo nota (qué bien me viene este blog para ampliar mi lista de no-leídos :) )

Mavi, me alegro de oírte tararear. La música es terapéutica

Interrogación, Bob Dylan nunca me viene a la cabeza, simplemente porque vive siempre dentro de ella ;) Intenta otra vez Rayuela, algún día. No es el mejor del mundo (para mí) pero me gusta el aire que respiran los personajes

Ladydark, sí era un juego extraño; es una mezcla de Charlie Parker, Dexter Gordon y Lester Young; el tamaño (del saxo) no importa :) No puedo ver aquí el enlace, pero en cuento llegue a casa pienso disfrutarlo. Gracias.

Atikus, tú ya sabes que el misticismo del músico suele ser bastante casto; desde el escenario no es fácil agarrar a la chica :)

Gracias, portorosa. Me alegro de que le guste.

Buenísimo, Klaudia. Cortázar sí sabía hablar de jazz. Ladydark nos lo ha dejado también por ahí arriba.

marzo 05, 2007 1:47 p. m.  
Blogger Ciudad burbuja dijo...

Sólo en la voz de Nina Simone Wild is the wind tiene el poder de las verdades que hacen llorar.

marzo 05, 2007 2:29 p. m.  
Blogger m dijo...

El blues es uno de los géneros musicales capaz de arrancarme lágrimas. Demasiado talento en este escrito. Mis felicitaciones. Evocador, estas palabras se han metido en mi piel como navajas. Un auténtico placer descubrirte, amigo. Besos cálidos!!

marzo 05, 2007 2:57 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Señorita Catarata, la versión original de Bowie es maravillosa. Envolvente, un poco etílica y con sabor mareante de sexo. Se la recomiendo

Gracias, sirena. Acepto los besos cálidos; ya sabe que los lagartos somos de sangre fría y todo calor nos viene bien. Muchas gracias por pasarte por aquí.

marzo 05, 2007 3:36 p. m.  
Blogger Tamaruca dijo...

Qué afortunada la chica de la camiseta roja.

¿Existe mejor regalo que la vibración y el sentimiento que transmite un blues?

Rayuela me trae malos recuerdos, umm... Lo leí en un momento de mi vida un poco feo.

¡Besicos!

marzo 05, 2007 4:37 p. m.  
Blogger Narrador dijo...

Tu tienes swing... Y sabes de sobra que sin el esto no significa nada.

Reverencia

PD: Un Libro para el lagarto:
"Menos que un perro" de Charles Mingus

marzo 05, 2007 6:13 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Tamaruca ¿mejor regalo? Mmm, déjame pensar... ¿qué tal vibración y el sentimiento que transmite un blues acompañado de un millón de dólares? ;))

Hay mucha literatura maravillosa y nunca tendremos tiempo de leerlo todo. Así que fuera Rayuela! Quitemos todo lo feo de nuestras vidas.


Narrador, intenté comunicarlo, sí. Espero que realmente pueda leerse a ritmo de blues :) Gracias por la recomendación

marzo 05, 2007 7:08 p. m.  
Blogger El detective amaestrado dijo...

Si Don Julio lvantara la cabeza, con lo que le gustaba la música negra, creo que te hubiese aplaudido

marzo 05, 2007 7:19 p. m.  
Blogger Arcángel Mirón dijo...

El blues es tan sanguíneo... hay que tener temperamento para amarlo.
El blues se parece a algunas personas...

marzo 05, 2007 8:18 p. m.  
Blogger Ciudad burbuja dijo...

Tuve en cuenta su recomendación, señor Lagarto, y escuché seguidas las dos versiones de Wild is the wind. Bowie nos perturba, como verse en otro. Simone nos calma, como verme en mí. GRACIAS.

marzo 05, 2007 10:12 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Eso sí que es un cumplido detective. ¡Rápido! ¡que alguien le levante la cabeza al señor Cortázar!

Arcángel, el blues es un buen amante. Un poco tristón, pero siempre fiel y cariñoso

Buen gusto, señorita Catarata. Brindemos por las mandolinas.

marzo 06, 2007 9:30 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho tu escrito chico negro y melancólico; ese escrito entre notas, escalas, figuras, sotenidos y bemoles.Entre partituras escritas con notas negras, corcheas, semi-corcheas, tresillos y silencios; alguna que otra fusa y semi-fusa.Pero siempre siguiendo el ritmo, marcando el compás...

No te preocupes si una nota sonó en el aire mal matizada, la chica de la camiseta roja no lo notó y tu te preocupaste demasiado...

Sigue tocando como hoy, a mi me gustó y seguiré visitando este bar.

Un saludo de una chica blanca.

marzo 06, 2007 3:08 p. m.  
Blogger almena dijo...

Me quito el sombrero ante este lagarto capaz de escribir con esa garra.
Tu escrito atrapa.
Saludos!

marzo 06, 2007 3:46 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Hola María, gracias por pasarte por aquí. En el blues es esencial dar alguna nota fuera de escala. Es eso lo que da el alma, lo que hace todo se sienta más vivo que nunca. Tómate algo para acompañar el blues :)

Almena, este lagarto te ofrece la garra, y dos besos, y te da la bienvenida. Gracias.

marzo 06, 2007 5:25 p. m.  
Blogger desconvencida dijo...

Muy bueno este post, me ha evocado "The soul of a man" de Wim Wenders...

marzo 06, 2007 5:38 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Gracias desconvencida. Se lo dedicaremos a Virüs ;)

Un día tenemos que hablar de Wenders, sí.Creo que se lo prometí a Sintagma un día.

marzo 06, 2007 6:28 p. m.  
Blogger el santo job dijo...

precioso, sutil, azul...
me ha gustado

marzo 06, 2007 6:48 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Gracias por pasarte por aquí, Job. Y por tu paciencia :)

Brindemos por la música, the big music.

marzo 06, 2007 7:04 p. m.  
Blogger Javier Luján dijo...

Ayer, en este cabo del que hablas para perderse, me encontré tremendo lagarto con esa misma fuerza que demuestras tener tú en cada uno de tus escritos. Dije, coño, nosurrender.
Un saludo, genio.

marzo 06, 2007 8:01 p. m.  
Blogger Mandarina azul dijo...

¿He leído Wim Wenders? ¿Dónde me tengo que apuntar para hablar de él?

marzo 06, 2007 8:02 p. m.  
Blogger desconvencida dijo...

Sisi,hablad de Wenders...

marzo 07, 2007 3:32 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Wenders y Houellebeq

¡¡me acumuláis trabajo!! ;)

marzo 07, 2007 4:01 p. m.  
Blogger Tuti dijo...

Me ha encantado. El libro elegido sísísísí. Una canción: i´ll make love to you and end of road, baby face con beverly crowder.

Estoy perdida en tu laberinto.

marzo 17, 2007 9:47 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

¿es una proposición? ;)))

marzo 17, 2007 11:27 p. m.  
Blogger Tuti dijo...

ma´ pillao desprevenida, mister Nos.

pd: :-))

marzo 20, 2007 11:59 p. m.  
Blogger NoSurrender dijo...

Si me necesitas, silva

marzo 21, 2007 12:01 a. m.  
Anonymous Diciembre dijo...

Aunque es mucho menos poética, no he podido evitar acordarme de la Ligia Elena de Rubén Blades.

Ellos se mudaron a un cuarto chiquito, con muy pocos muebles. Y allí viven contentos y llenos de felicidad...

Que bella tu historia, NoSurrender. Bellísima :)

mayo 22, 2011 11:20 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home