La canción de las montañas de Albania
Remando al viento es una maravillosa película, de esas que no se pueden producir cada año. De esas que veinte años después aún te preguntas cómo alguien pudo atreverse a producir algo así.
Claro que quien escribió y dirigió esta película es Gonzalo Suárez, alguien de quien Julio Cortázar dijo: “¿Escritor que hace cine, cineasta que regresa a la Literatura? De cuando en cuando hay mariposas que se niegan a dejarse clavar en el cartón de las bibliografías y los catálogos, de cuando en cuando, también, hay lectores o espectadores que siguen prefiriendo las mariposas vivas a las que duermen su triste sueño en las cajas de cristal".
El guión comienza con Percy B Shelley y Mary Shelley huyendo de Londres a la casa de Lord Byron en Suiza. Una reunión que inspiró a Mary, entre alcohol y láudano, a escribir la famosa novela de terror Frankenstein.
La película trata básicamente del proceso creativo; de la materialización del arte en una forma de vida autónoma, superior, capaz de observar a su propio autor desde otra altura, ahora ya inalcanzable. La disculpa es el Frankestein de Mary Shelley, pero sólo como una metáfora de todo lo que llevamos dentro y nos supera.
La película está llena de diálogos intensos y poéticos (claro, con esos personajes es normal que se hable de algo distinto al fútbol...), pero voy a compartir aquí sólo uno
Lord Byron y su amigo el médico y poeta John W Polidori están navegando por las tranquilas aguas del lago Ginebra, remo con remo.
POLIDORI: Después de todo, ¿qué puede hacer Milord que no pueda hacer yo?
BYRON: Si me obliga, Polidori, no tendré más remedio que decírselo
POLIDORI: Dígamelo, Milord
BYRON: Hay tres cosas que yo puedo hacer y usted no puede
POLIDORI (impaciente): ¿Qué tres cosas?
BYRON: Atravesar un río a nado, apagar una vela de un tiro a veinte pasos...
POLIDORI (inquieto): ¿Y la tercera?
Byron se queda traspuesto, deja de remar y mira al infinito
BYRON: ¡Qué inútil resulta todo, Polidori! ¿Para qué atravesar un río? ¿Para qué apagar una vela? La acción es tan inútil como la gloria. Se gane o se pierda, el mundo no vale nada. la única sabiduría está entretejida con los hilos del desprecio.
POLIDORI (más inquieto): ¿Pero cual es la tercera cosa, Milord?
BYRON (volviendo en sí, socarrón): Escribir un poema del que se han vendido catorce mil copias en un solo día.
(Polidori enmudece y empieza a remar con más furia)
¿No es genial? vamos, ¿alguien se anima a abrir la ventana ahora mismo y cantar esa maravillosa canción de las montañas de Albania?
Bueno, que sepáis, lectores, que hay tres cosas que yo puedo hacer y vosotros no podéis: la mejor tortilla de patatas de Madrid Capital, canturrear Serenade de Dover mientras preparo una presentación sobre el efecto del crecimiento de las tecnologías de la información en la sociedad, y mantener un debate a las dos de la madrugada completamente sobrio que termina encontrando serias analogías entre la pornografía y las zapatillas de deporte marca Nike.
Una película para la Criatura: Arrebato, de Iván Zulueta
Una canción para la Criatura: Scary Monsters, de David Bowie
Un libro para la Criatura: Juegos de la edad tardía, de Luis Landero
Claro que quien escribió y dirigió esta película es Gonzalo Suárez, alguien de quien Julio Cortázar dijo: “¿Escritor que hace cine, cineasta que regresa a la Literatura? De cuando en cuando hay mariposas que se niegan a dejarse clavar en el cartón de las bibliografías y los catálogos, de cuando en cuando, también, hay lectores o espectadores que siguen prefiriendo las mariposas vivas a las que duermen su triste sueño en las cajas de cristal".
El guión comienza con Percy B Shelley y Mary Shelley huyendo de Londres a la casa de Lord Byron en Suiza. Una reunión que inspiró a Mary, entre alcohol y láudano, a escribir la famosa novela de terror Frankenstein.
La película trata básicamente del proceso creativo; de la materialización del arte en una forma de vida autónoma, superior, capaz de observar a su propio autor desde otra altura, ahora ya inalcanzable. La disculpa es el Frankestein de Mary Shelley, pero sólo como una metáfora de todo lo que llevamos dentro y nos supera.
La película está llena de diálogos intensos y poéticos (claro, con esos personajes es normal que se hable de algo distinto al fútbol...), pero voy a compartir aquí sólo uno
Lord Byron y su amigo el médico y poeta John W Polidori están navegando por las tranquilas aguas del lago Ginebra, remo con remo.
POLIDORI: Después de todo, ¿qué puede hacer Milord que no pueda hacer yo?
BYRON: Si me obliga, Polidori, no tendré más remedio que decírselo
POLIDORI: Dígamelo, Milord
BYRON: Hay tres cosas que yo puedo hacer y usted no puede
POLIDORI (impaciente): ¿Qué tres cosas?
BYRON: Atravesar un río a nado, apagar una vela de un tiro a veinte pasos...
POLIDORI (inquieto): ¿Y la tercera?
Byron se queda traspuesto, deja de remar y mira al infinito
BYRON: ¡Qué inútil resulta todo, Polidori! ¿Para qué atravesar un río? ¿Para qué apagar una vela? La acción es tan inútil como la gloria. Se gane o se pierda, el mundo no vale nada. la única sabiduría está entretejida con los hilos del desprecio.
POLIDORI (más inquieto): ¿Pero cual es la tercera cosa, Milord?
BYRON (volviendo en sí, socarrón): Escribir un poema del que se han vendido catorce mil copias en un solo día.
(Polidori enmudece y empieza a remar con más furia)
¿No es genial? vamos, ¿alguien se anima a abrir la ventana ahora mismo y cantar esa maravillosa canción de las montañas de Albania?
Bueno, que sepáis, lectores, que hay tres cosas que yo puedo hacer y vosotros no podéis: la mejor tortilla de patatas de Madrid Capital, canturrear Serenade de Dover mientras preparo una presentación sobre el efecto del crecimiento de las tecnologías de la información en la sociedad, y mantener un debate a las dos de la madrugada completamente sobrio que termina encontrando serias analogías entre la pornografía y las zapatillas de deporte marca Nike.
Una película para la Criatura: Arrebato, de Iván Zulueta
Una canción para la Criatura: Scary Monsters, de David Bowie
Un libro para la Criatura: Juegos de la edad tardía, de Luis Landero
27 Comments:
Llámame excéptica... pero yo si no pruebo esa tortilla, no me creo nada.
(a ver si cuela)
Lo que hubiera sido realmente cojonudo en esa conversación es que Byron le hubiera dicho las tres cosas que él no podría hacer nunca... Supongo que es mucho más complicado, más masoquista... Al fin y al cabo, es en el fracaso donde más nos diferenciamos, no en nuestras proezas, porque joder, fracasar con estilo es cosa de pocos.
Un blog excelente, Lagarto, si me lo permite.
Salud.
Llámame competitiva, pero en cuanto aterrice por Madrid capital te reto con todos los comentaristas de tu blog por testigos.
La mejor tortilla de patatas?
AMOS ANDA!!
Cantaría encantada la canción de las montañas de Albania... sería estupendo que lloviera y refrescase un poco :) Pero se me ha atrancao la ventana!
Beso.
NoSurrender, qué película más fascinante ésta de Remando al viento, verdaderamente genial, la mezcla de realidad y ficción, los diálogos (estupenda la frase de Byron que aparece en el vídeo, sobre la creación del destino y su aceptación), la ambientación un tanto onírica, tan cuidada (aquella jirafa que aparece de repente por un salón, si no recuerdo mal), la inolvidable banda sonora, entre trágica y melancólica... en fin, todo, como ves, soy una auténtica devota de esta peli y me encantaría volver a verla.
En cuanto a tus capacidades exclusivas y en concreto a la última, se me ocurren de entrada algunas analogías entre la pornografía y las Nike que mejor me ahorro después de todo lo dicho en el blog de Ana. Pero a las dos de la mañana y completamente sobrio...mmmm.... vamos, como que me resulta difícil de creer. Exijo pruebas para concederte algún crédito en esa rara habilidad :P
Ah! y también en lo de la tortilla de patatas.
Un beso, y gracias por recordarnos esta peli tan estupenda.
Pues que no había pasado por aqui y...caray con lo que me encuentro...
Espero que no le importe si enredo un poco por aquí y por allá, la película es redonda, sin duda
Saludos y perdón por entrar sin llamar
:)
Llevo cinco minutos en blanco intentando dar contenido a tres líneas, tres demostraciones indicativas de que hay algo que yo puedo hacer y vosotros no
...
Ah! ya se, hay una: he sido capaz de dejar de fumar cien veces
qué tristeza, buscar tres cosas de este tipo y que no se te ocurra ninguna. es casi tan deprimente como leer los poemas del pequeño Michel que vana a editar ahora... en fin. hay dias nublados...
hermosas palabras las de julio. por cierto, acabe ayer los detectives salvajes: fascinante
Sintagma, un día hago una y la traigo aquí al blog. Haré cuadraditos, para que todos podamos robarla. ¡Trae tú los palillos!
Bueno, algunas cosas no hizo Byron. Es famosa esa anécdota en la que alguien le preguntó “Milord, ¿se arrepiente usted de los pecados que ha cometido?” y él contestó “yo sólo me arrepiento de los que no he podido cometer” Un placer, malditos tacones, que se deje caer por aquí. Bienvenida y salud.
Un árbol, diremos a Sintagma que traiga más palillos. Competición de tortillas ¡bien! ¿con cebolla o sin cebolla? Un beso.
Antígona, la jirafa en ese palacio de Venecia es algo precioso, sí. Realmente Lord Byron tenía una jirafa en su casa cuando vivía en Venecia. Y un leopardo, también. En cualquier caso, Antígona, te reto a mantener una conversación así :P un beso.
e-catarsis, pasa sin llamar. Al fondo hay sitio, sobre los cojines azules. Gracias por venir.
Inquietante Sonámbula, me temo que yo dejo de fumar cada noche pero... ¡qué absurdo me parece todo, sonámbula! :) no sabía lo de los poemas de Michel ¡estaré al tanto! :P
Txe, me alegro de que hayas tenido la oportunidad de disfrutar de Bolaño, es una bonita experiencia. Y gracias por pasarte por aquí.
Leé Las piadosas, de Federico Andahazi.
NoSurrender sabiendo mi devoción por Byron y en general por el romanticismo, comprenderá que "Remando al viento" me entusiasme, su fotografía sacada de un cuadro de Friedrich, el acercamiento al Byron más humano, el suicida Polidori, los Shelley (aunque a Mary no le gustaría esto)... Gonzalo Suarez pare una hermosa "rara avis" en el cine español retomando un mito y recreándolo en una atmósfera fantástica, algo que también haría posteriormente con "Don Juan en los infiernos". Respecto a sus habilidades... Me preocupa, me preocupa, eso de Nike y la pornografía, tks. Y termino "Mary, ya nunca remaremos..."
Arrebato de Ivan...con un desaprovechado Eusebio Poncela (bueno, me parece que es que el "pasa" de tanta fatuidad gratuita en el emnudo del cine hoy...)la "calavera" más bella y expresiva del cine español, con diferencia...
Esta película me atrapó la primera vez que la vi, después volví a verla dos veces más y siguió atrapándome. No sé si volver a verla, temo terminar en una jaula, jeje.
En cuanto a esas tres cosas que tu puedes hacer y nosotros no... Bueno, la segunda lo admito, la presentación tendría que versar sobre otro tema. ;-)
Avisa el día de la tortilla de patatas, ok?
Un beso (mientras canturreo Serenade de Dover)
un post muy interesante pero sobretodo por lo de la tortillita, jeje...supongo que sera jugosita ...y tiene cebollita?
Bueno yo la quiero probar eh!!
(Me fío, no como Sintágma, jaja)
Bueno tres cosas que sólo yo hago:
Unas croquetas de muerte
Cometer cientos de faltas de Ortográfia.
Tocar la guitarra sin saber que existen las notas.
Una con cebolla y otra sin.
Y serían cuatro tortillas.
Me parece razonable, teniendo en cuenta que tienes un público numeroso y con pinta de saber mucho de todo.
Fecha y en marcha.
Te vas a cagar.
Un beso.
Arcángel, no conocía a Federico Andáis, pero veo en la red que le inspiran las mismas cosas. Buen gusto ;)
Bueno, Ladydark, a Mary Shelley aún le gustaba menos el apellido Goldwin ;) Don Juan en los infiernos también es una película para perder la respiración. Otro día hablaremos de ella. Brindemos por don Gonzalo.
Nancicomanci, es una gran película, muy experimental, que sólo está valorada en círculos muy determinados. Una pena que el director se viniera abajo, porque era capaz de aportar mucho.
Helena, te gustará todas las veces que la veas. Como mi tortilla :P
Atikus, con cebolla ¡siempre con cebolla! ¡Trae las croquetas!
Un árbol, queda usted retada. Llamaremos a la prensa. Necesitaremos un patrocinador…
Aquí fué dónde se enamoraron el Hugh y la Elisabeth... ay... entre rodaje y rodaje....
Esperaba ansiosa la tercera cosa, no se, tipo, el misterio de la cripta embrujada, gran libro, o la verdad universal de la vida... pero lo de las 14.000 copias, me dejó sin inmutar, seguramente será porque no se el valor que tiene ser capaz de conseguir esa aceptación....
Yo se hacer tres cosas mejor que nadie:
-Comerme el Hagendazz en segundos, el de litro.
-Cordero y macarrones, cuando trabajaba en la agencia, la peña se venía desde Príncipe de Vergara a comer mis macarrones.
-Mover las caderas.
Ale, ya está, bueno, tengo mas, pero sin ibéricos,no hay intercambio de intimidades.
Oiga, le hice una putadilla, un meme de esos horribles, supongo que hará cómo que no lo vió, pero ahora ya lo sabe....ayyyyyyyyy, sorry¡
La conversación de las dos de la mañana parece francamente interesante. U beso :)
Sí que es una hermosa película.
Gonzalo Suarez es un francotirardor. Supo entender el medio mejor que otros escritores (Greenaway) a la hora de filmar sus palabras.
Hay, además, miedo y malditismo en la cinta de Suarez. Él es un maldito amigo de malditos. No sé si sabes que le unió una profunda amistad con Sam Peckinpah. Se conocieron accidentalmente y terminaron fraguando una amistad que duró hasta la muerte del director navajo. Como muestra de aprecio, Peckinpah le regaló el pañuelo que lució William Holden en "Grupo Salvaje". Premonitoriamente, Suarez le dedicó su película "Epílogo" pero Sam ya no estaba aquí para verlo.
¿Cómo era aquella canción albanesa?... "Aaaaaaaaaaaaaaa!!!"
Una canción para la criatura: "La parada de los monstruos" de Tod Browning.
Claro, maléfica, con esos textos era normal que se encandilasen el uno del otro ¿no? Bueno, a principios del siglo XIX, vender 14.000 poemas en Londres el primer día de publicación era todo un éxito; entre otras cosas no se editaban normalmente novelas de tiradas tan amplias.
Maléfica, ya sabes; ¡trae macarrones! ¡Sintagma, aparte de palillos necesitaremos tenedores de plástico! Ahora echo un vistazo a tu meme.
Miss missing, no te podría hacer un resumen ahora, ¡los designios dialécticos son inescrutables! ;) un beso
Alex, Gonzalo Suárez es uno de los grandes valores españoles vivos, debería hacer más cine. Yo tuve la oportunidad de conocerle y charlar con él hará unos diez años. Para mí fue muy emocionante. ¡Gracias por cantar conmigo!
¿Y si no hay viento, Capitán?
Me alegra saber que compartimos gustos. Remando al viento es sin duda una cinta genial. Te recomiendo buscar los libros de Gonzalo Suarez que también es un gran escritor.
Saludos.
Ahora que tengo de fondo al comentarista del partido de fútbol Barcelon-Espanyol me viene a la mente que Gonzalo Suárez también fue comentarista de fútbol.
Un abrazo.
Si no hay viento, annabellee, pararemos en medio del lago y nos contaremos historias de terror.
Isa, Gonzalo Suárez es un gran cuentista, tienes razón. Es, creo que lo ha dicho alguna vez, un escritor que circunstancialmente se acercó al mundo del cine. Saludos.
Es cierto, Lucía; le gustaba mucho el fútbol. De hecho tiene una gran película, llena de poesía, que se llama el Portero, con Carmelo Díaz. Gracias por pasarte por aquí.
Una gran película, sin duda. Y un delicioso "post"
me encanto la pelicula, y además, hace poco estuve en el golfo de los poetas, lugar donde tambien se solian reunir Byron y Shelley y me acordé mucho de ese film.
En cuanto a Arrebato.. menuda paranoia...!
No soy dado a estos excesos como ya sabes, amigo reptil, pero en estos momentos creo que escribes el mejor blog de toda la red.
O de los que yo he encontrado vaya.
De todos modos, conociéndome, ya sabes que esto puede ser un insulto encubierto.
Desconfía.
:-)
Publicar un comentario
<< Home